El amor por los niños

14:20 - 2017/04/19

El Mensajero de Dios (s.a.w.) a tal punto era tierno con los niños, que se transmitió que en el evento de la llegada del Profeta (s.a.w.) a Tâ’if, los niños de Tâ’if le arrojaban piedras, pero el Mensajero de Dios (s.a.w.) no les impedía hacerlo, y era ‘Alî (a.s.) quien alejaba a los niños de él.

El amor por los niños

- Del Noble Profeta del Islam (s.a.w.) - “Amad a los niños y sed cariñosos con ellos.”

El amor por los niños
Así como el niño necesita de comida, agua y aire, también necesita de amor y caricias, puesto que el amor constituye su mejor alimento espiritual; es por ello que al niño le agrada besar, oler y abrazar, y lo disfruta.
Por lo tanto, quien desde el comienzo de su infancia disfrutó de manera suficiente del amor y cariño de sus padres y se sació de la refrescante vertiente del amor, posee un espíritu feliz y una mente entusiasta. En las narraciones de los líderes de la religión se explicó y aconsejó de diferentes maneras con relación al cariño que se debe tener por el niño. Seguidamente mencionaremos algunas de ellas: En la Jutbah ash-Sha‘bânîiah, en tanto explicaba las responsabilidades de la gente, el Mensajero de Dios (s.a.w.) dijo: “Respetad a vuestros mayores y mostrad compasión y afecto a vuestros niños.”[1]

Dijo en otro hadîz: “Quien no siente compasión ni amor por los niños musulmanes y no respeta a los mayores, no es de los nuestros.[2] En otra narración dijo: “Amad a los niños y sed cariñosos con ellos.”[3]
‘Alî (a.s.) aconsejó lo siguiente en su lecho de muerte y antes de alcanzar el martirio: “En tu familia sé compasivo con los niños y respeta a los mayores.”[4]
En otra narración dijo lo siguiente a sus seguidores: “En su comportamiento el niño debe imitar a los mayores, y los mayores también, indefectiblemente deben ser cariñosos con los niños, no sea que se comporten como los infieles y opresores de la Época de la Ignorancia.”[5]

Dijo el Imam As-Sâdiq (a.s.): “El hombre que ama mucho a su hijo se ve abarcado por la Misericordia y el Favor especial del Grandioso Dios.”[6] El amor del Profeta (s.a.w.) por los niños Dijo ‘Alî (a.s.): “Yo era un pequeño niño y el Profeta (s.a.w.) me sentaba en su regazo y me abrazaba, pegándome a su pecho, y a veces me hacía dormir en su lecho, y por cariño, apoyaba su rostro sobre el mío, y yo podía percibir su exquisito perfume.”[7] Así es, el niño necesita de cariño; se le debe acariciar la cabeza y mirarlo con los ojos del amor, haciéndolo feliz a través de una cálida y amorosa mirada.[8]
El Mensajero de Dios (s.a.w.) a tal punto era tierno con los niños, que se transmitió que en el evento de la llegada del Profeta (s.a.w.) a Tâ’if, los niños de Tâ’if le arrojaban piedras, pero el Mensajero de Dios (s.a.w.) no les impedía hacerlo, y era ‘Alî (a.s.) quien alejaba a los niños de él.[9]

Cuando el Mensajero de Dios (s.a.w.) veía a los niños de los Ansâr, pasaba su mano sobre sus cabezas, los saludaba y rogaba por ellos.[10] Dijo Anas ibn Mâlik: “No vi a nadie más cariñoso con su familia que el Mensajero de Dios (s.a.w.).”[11]
Él cada día a la mañana acariciaba la cabeza de sus hijos y nietos38, y mostrar ternura, amor y afecto por los niños era una de las características del Mensajero de Dios (s.a.w.). Cierto día el Profeta (s.a.w.) junto a sus Compañeros caminaban por un camino donde había unos niños jugando. El Profeta (s.a.w.) se sentó junto a uno de ellos, besó su frente y fue cariñoso con él. Al preguntársele la razón por la que había actuado de esa manera, respondió: “Un día vi que este niño jugaba con mi hijo Al-Husein (a.s.) y levantaba la tierra bajo los pies de Al-Husein (a.s.) y la frotaba por su rostro. Por lo tanto, ya que él es de los amigos de Al-Husein, yo también lo quiero. Gabriel (a.s.) me ha informado que este niño será de los compañeros de Al-Husein (a.s.) en Karbalâ’.”

Dijo el Imam As-Sâdiq (a.s.): Mûsâ ibn ‘Imrân (Moisés) preguntó en sus letanías: “¡Dios mío! ¿Cuál es la mejor acción ante Ti?”. Se le reveló: “¡Amar a los niños es el mejor accionar ante Mí! puesto que el niño en su esencia es adorador de Dios y Me ama. Si un niño fallece, Yo, a través de Mi Misericordia, lo hago ingresar en Mi Paraíso.”
Pero no se debe exagerar en el amor que se siente por los niños, puesto que resultará perjudicial, y esa es la razón por la que en las narraciones islámicas se prohibió hacer eso

[1]:Usûl al-Kâfî, t. 1, p. 448
[2]: Ihqâq al-Haqq, t. 4, p. 153
[3]: Tafsîr al-Furât, p. 112.
[4]: Kanz al-‘Ummâl, t. 6,p. 397.
[5]: Ihqâq al-Haqq, t. 3, p. 26
[6]: Ihqâq al-Haqq, t. 8, p. 352
[7]: Ihqâq al-Haqq, t. 8, p. 359
[8]: Ihqâq al-Haqq, t. 8, p. 378
[9]: Ihqâq al-Haqq, t. 5, p. 420;
[10]: Al-Isâbah, t. 1, p. 318.
[11]: Al-A‘lâm, de Az-Zarkalî, t. 2, p. 125
 

El amor por los niños Así como el niño necesita de comida, agua y aire, también necesita de amor y caricias, puesto que el amor constituye su mejor alimento espiritual; es por ello que al niño le agrada besar, oler y abrazar, y lo disfruta. Por lo tanto, quien desde el comienzo de su infancia disfrutó de manera suficiente del amor y cariño de sus padres y se sació de la refrescante vertiente del amor, posee un espíritu feliz y una mente entusiasta. En las narraciones de los líderes de la religión se explicó y aconsejó de diferentes maneras con relación al cariño que se debe tener por el niño. Seguidamente mencionaremos algunas de ellas: En la Jutbah ash-Sha‘bânîiah, en tanto explicaba las responsabilidades de la gente, el Mensajero de Dios (s.a.w.) dijo: “Respetad a vuestros mayores y mostrad compasión y afecto a vuestros niños.”

Plain text

  • Etiquetas HTML permitidas: <a> <em> <strong> <span> <blockquote> <ul> <ol> <li> <dl> <dt> <dd> <br> <hr> <h1> <h2> <h3> <h4> <h5> <h6> <i> <b> <img> <del> <center> <p> <color> <dd> <style> <font> <u> <quote> <strike> <caption>
  • Las direcciones de las páginas web y las de correo se convierten en enlaces automáticamente.
  • Saltos automáticos de líneas y de párrafos.
2 + 17 =
Solve this simple math problem and enter the result. E.g. for 1+3, enter 4.